Lima, 9 ene (EFE).- La ministra de Relaciones Exteriores, Elizabeth Astete, afirmó este sábado que su país aún no ha cerrado un acuerdo para comprar las vacunas de Pfizer contra la covid-19 por pedidos del laboratorio que incluyen “motivos suficientemente importantes” para nuestro país.
“Lo único que puedo decir es que han sido motivos suficientemente importantes para que no se pudiera avanzar, y esto no es un tema solamente de la Cancillería. El sector de Economía y Finanzas ha sido uno de los más claros en señalar los problemas”, señaló Astete en la emisora RPP Noticias.
La canciller se refirió a este tema después de que el pasado miércoles el presidente Francisco Sagasti anunció que su país ya tiene acuerdos con Sinopharm, AstraZeneca y la iniciativa multilateral Covax para comprar, en total, cerca de 66 millones de dosis de las nuevas vacunas.
NEGOCIACIÓN COMPLEJA
Astete remarcó que existen cláusulas de confidencialidad que se deben cumplir para no afectar las negociaciones que aún mantienen con Pfizer para intentar encontrar “una salida” al tema, así como con otros laboratorios con los que trabajan “intensamente”.
“Tenemos que manejar con mucho cuidado los compromisos que se asumen y no es por falta de transparencia”, agregó.
Confirmó que, en el caso de Pfizer, el Gobierno que presidió Martín Vizcarra (2018-2020) suscribió un acuerdo de confidencialidad en septiembre pasado y se tenía previsto firmar el contrato de compra definitivo en octubre.
Esto no ocurrió y, luego de la destitución de Vizcarra por el Congreso el 9 de noviembre y la crisis política y social que se presentó en el país durante una semana, el Gobierno de transición de Sagasti recibió el 23 de noviembre el contrato final enviado por el laboratorio, que debía ser firmado una semana después.
Tras reiterar que se deben respetar los términos de confidencialidad, Astete dijo que un equipo de asesores jurídicos del Estado encontró “dificultades serias, que no tienen que ver con el tema de renunciar a la inmunidad de jurisdicción”.
ASPECTOS DE SOBERANÍA
Esta semana, la ministra de Salud, Pilar Mazzetti, también comentó que este acuerdo aún no se ha cerrado por “detalles” que impiden llegar a un consenso, pero remarcó que no podía ser más específica por temas de confidencialidad.
Comentó, empero, que “cuando se resuelve una controversia en un tribunal, se establece que tiene que haber un resarcimiento que puede involucrar” a las reservas nacionales.
“En todos los acuerdos tomamos en cuenta que hay aspectos de nuestra soberanía que el país tiene que cautelar, que sirve para las próximas generaciones”, sostuvo.
VACUNAS Y REBROTE
Esta semana, además del anuncio de la compra de las vacunas, las autoridades sanitarias admitieron que Perú afronta un rebrote de la pandemia, aunque señalaron que este aún no tiene las características para ser calificado como una segunda ola.
El viernes, Perú volvió a superar los 2.000 casos diarios, lo que llevó a 1.029.471 el total de infectados, mientras que la muerte de 96 personas elevó a 38.145 los decesos causados por la enfermedad.
Entre los nuevos afectados está el ministro de Ambiente, Gabriel Quijandría, por lo que el gabinete de ministros se someterá a pruebas de descarte para confirmar que “todo está bien”, según dijo la primera ministra, Violeta Bermúdez.
Perú también confirmó el viernes que ha detectado, en una mujer de Lima, el primer caso de la variante británica del coronavirus, cuya mutación lo hace hasta un 70 % más contagioso que la cepa original causante de la covid-19.
El Gobierno está a la espera de recibir este mes un primer lote de un millón de dosis de la vacuna del laboratorio chino Sinopharm para comenzar a inmunizar a su población.